Supone estimar el valor de una empresa mediante la comparación de éste con el valor de otras empresas de similares características que cotizan en bolsa. Para ello se calculan algunos ratios que muestren la relación entre el valor de cada una de esas empresas y alguna medida de su resultado financiero. Este ratio posteriormente se aplica a la misma medida del resultado financiero de la compañía objeto de valoración, obteniendo así una valoración comparativa.
Así tenemos:
1) Análisis de la empresa objetivo,
2) Análisis y selección de las empresas comparables,
3) Cálculo y selección de los múltiplos de cotización,
4) Aplicación de los resultados a la empresa objetivo,
5) Selección de un rango de valoración para la empresa objetivo.
Se debe utilizar en cada caso el ratio de margen operativo normalmente utilizado en el sector objeto de estudio. Generalmente el múltiplo más utilizado es el de valor de la empresa/EBITDA. Los analistas típicamente revisan la media de cualquiera de los ratios que seleccionan.
Factores relevantes para la selección de compañías comparables: a) Compañías cotizadas en bolsa, b) Realizar la misma actividad que la empresa objetivo, c) Tener un mismo mix de negocio y/o productos, d) Ser de un mismo país o región, e) Tener un tamaño similar, f) Similares perspectivas de crecimiento de beneficios, g) Equipo de dirección de categoría similar, h) Rentabilidad similar, i) Posición competitiva parecida, j) El mismo grado de integración vertical (activos), k) Estructura y volumen de gastos I+D y marketing similares.
Con el objeto de poder tener una mejor comprensión de este método de valoración adjunto un caso práctico que resulta muy clarificador y que te puedes descargar pinchando en la imagen del post: ejemplo Múltiplos de Cotización
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